Servicio GRATUITO ofrece hacer compras para los más vulnerables durante el distanciamiento social

La generación más joven se puso las pilas para ayudar al prójimo durante la pandemia. ...

¿Buscaban voluntarios? ¡Aquí los tienen!

La generación más joven se puso las pilas para ayudar al prójimo durante la pandemia. El Coronavirus no los parará. Si bien algunos de nosotros podemos estar saludables y de lo único que debemos preocuparnos es de buscar entretenimiento en casa para proteger nuestras vidas y las vidas de los demás, algunos héroes comunitarios están dispuestos a arriesgar sus vidas para llevar comida a los más vulnerables.

Fue después de que dos Millennials de Nueva York, Liam Elkind, de 20 años, Simone Policano, de 25 años, comenzaron el servicio Invisible Hands Deliveries que el mundo pronto llegó a ver la amabilidad que pueden llegar a tener los ocupados neoyorquinos. El servicio ofrece hacer “mandados” o compras en supermercados y farmacias para ayudar a la comunidad de ancianos y mayores en riesgo del área de Manhattan … ¡SIN COSTO ALGUNO! 

Pero no todo quedó en tres amigos que comezaron el servicio. El servicio de entrega que comenzó en Nueva York, ahora tiene más de 2.700 voluntarios que están usando sus “manos invisibles” para ayudar en todo el área de Nueva York y Nueva Jersey.

No solo los usuarios pueden solicitar entregas de artículos, sino que Invisible Hands también ofrece llamadas telefónicas de aliento a las personas que desean hablar con alguien.

Solo se trata de ayudar a la comunidad y la tecnología es su mejor amigo.

¿Cómo funciona y cómo se aseguran de que los jóvenes se mantengan a salvo?

“Cuando alguien envía una solicitud, enviamos una alerta a todos en el vecindario: ‘¿Quién quiere aceptarla?'”, dijo Elkind a Good Morning America (ABC). “Presentan su dirección, la orden de lo que necesitan y el método de pago preferido”. ¡Y listo! 

¿Cómo se aseguran de que no haya contacto con los miembros más vulnerables de su comunidad? Aquí está el protocolo que siguen:

Llaman al comprados con anticipación y dicen: “Hola, estoy afuera de la puerta”.

El comprador desliza su dinero por debajo de la puerta si no ha realizado un pago en línea.

El voluntario ubica los productos fuera de la puerta

Y siguen los reglamentos necesarios de seguridad como:

Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón durante un mínimo de 20 segundos o usar desinfectante para manos.

Abstenerse de tocar la cara después de haber estado afuera

Estornudar o toser en el codo

Practicar el “distanciamiento social”: Permanecer en el interior, evitar las multitudes, mantenerse a 6 pies de distancia de otras personas si tienen que salir

Para usar el servicio y obtener más información, visita invisiblehandsdeliver.org

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